De rostro pequeño y pómulos marcados, cuerpo menudo, delgado pero compacto, su caminar es decidido y avanza con paso presuroso. Estos serían algunos de los detalles que a primera vista, al "echarle el ojo", atraerían la atención de cualquier extraño que entrecruzara el camino con nuestro  "DESTACADO".

   Pero ya en la corta distancia, frente a frente con nuestro protagonista, la observación se torna más detenida y al detalle. Así, pronto se percibe su hablar rápido, brotando atropelladas las palabras, siempre con la sonrisa que aflora de sus labios, sonrisa espontánea y contenida, pero nunca por compromiso, al contrario, es sincera, afable y cálida, como su personalidad. Son unas cualidades que confirma y avala con la viveza, la chispa de sus ojos,  porque Zigor también se expresa con la mirada.

    Nuestro protagonista destacado, es Sukaldariburu(1) y vasco (Euskal Herria), desde que nació en el año 1974, allá en  Euba, municipio de Amorebieta-Etxano, provincia de Bizkaia. Zigor de niño ya tiraba "pal monte", literalmente dicho. Se rumora que más de una vez, en camino a la escuela, hacía "Pira"(2), "pellas", se pintaba la clase, marchándose a la montaña. Como se dice, que en sus épocas de Ikastola(3), tiraba para la cocina, algo muy vasco.

"La mejor manera de hacerse recordar es mostrando un corazón generoso ".

George Sand. Francia (1754-1816)-Novelista-.

   A sus 17 años, cursando los estudios de Hostelería (Escuela de Hostelería de Leioa), fue intensificándose su atracción por la montaña y la escalada, actividad a la que se dedicó durante varios años. Pero eso sí, nunca dejó de lado la otra gran pasión, el apego a las ollas, a la cocina. Es que va en su naturaleza, muy dentro de él y en consecuencia difícilmente podría ser de otra manera. Si hay algo que forma parte del "ser" vasco, es  comer y la gastronomía. En este punto se hace inevitable añadir una matización, justa y necesaria, porque No es comer, eso sí que no. ¡Es comer bien! Comer como mandan los cánones, vascos por supuesto. Es un santuario por el gusto, la sazón y los aromas. Ya hubiera querido tener "Francois Vatel", a semejantes colaboradores y comensales, para sí.

   Y Zigor en esto está "recargado"(4), no solo por lo dicho, también porque del hogar le nace el arte. Desde niño ya estaba rodeado por cazuelas, sartenes, fogones y olorosos "guisos de "asteburu"(5), y ahí sigue, conectado a la sapiencia y magia gastrónoma que desde aquella época fue aspirando.

   Tras la escalada, se pasó al duatlón, disfrutó del triatlón, encaminándose a las carreras de montaña, donde es un experto y reputado "Trail Runner". Pero es que hasta en la cocina se las ha tenido que ver en buenas carreras de fondo y hasta de obstáculos. No es cualquier cosa aprender y trabajar con Martín Berasátegui o Michel Guérard, batallar con el desempleo o multiplicarse en la empresa de cátering más grande del País Vasco. Pero de todas aquellas competiciones salió triunfante, hasta que después de todo, llega su gran momento u otro de los más grandes, porque con Zigor todo cuenta y suma.

   Siendo en EITB.1 (televisión vasca), donde da el salto definitivo a la pequeña gran pantalla, estrenándose como cocinero y "conductor" de Txoriene, un programa de cocina, en el que permaneció dos años y donde el "Sukaldariburu" como artista de los fogones daba y sacaba lo mejor de sí, entre plática y plática.

   Después le llega otra nueva oportunidad con el programa Chiloé Lasterka Munduan (una aventura ultra trail), con el mismo director de Txoriene (Alberto Arizkorreta). Un programa de nuevo formato, donde el equipo y Zigor viajan a lugares diferentes, inusuales, para participar en una competición, enfrentando un reto de Ultra Trail, Maratón o similar. Y ahí de la mano, o más correctamente por las piernas del protagonista, se muestran los atractivos, las maravillas naturales, monumentales y deportivas junto con la gastronomía típica de la zona. Pero eso no es todo, no queda ahí, aún van un paso más allá, porque también expone, muestra otra realidad humana, social y étnica. Es la otra mirada, la que concede visibilidad a los pueblos originarios, a las comunidades indígenas del lugar.

   Zigor no enfrenta Runner contra Chef o Viceversa, van unidos, porque como dicen por ahí: "solo la cuchara sabe lo que hay al fondo de la olla". Zigor igual te corre un "Caballo Blanco" con los Rarámuri, que elabora un marmitako(6), para chuparse los dedos. Eso sí, siempre aderezado con una animada plática y por supuesto "con mucho piripituchi" (7).  AUPA (8)

"Dejasteis huella en la Sierra Tarahumara". Zorionak (9).

" MEXIKO, CIHUAHUA "(10).

(1) Sukaldariburu: Chef (2) Pira: hacer pellas. (3) Ikastola: Centro educativo en Euskera.

(4) Recargado: Aumentado. (5) Asteburu: Fin de semana.

(6) Marmitako: Plato por excelencia, cocina vasca.

(7) Con Piripituchi: Echarle ganas, con arte. 

(8) Aúpa: Arriba. (9) Zorionak: Felicitaciones.  (10) Méxiko: México.