TURISMO Y EL DÍA "D" (1)
19.03.2020
Estaba próximo a cumplirse el 76 aniversario del día "D", que cambió el curso de una guerra, el destino de Europa y de la historia del mundo. Ahí comenzó el principio del fin de un régimen totalitario y cruel, de una liberación, que paradojas de la vida, fue bien aprovechada por otros regímenes autoritarios y degradantes del ser humano, para consolidar y expandir sus dictaduras.
Y aunque este no es el tema, la situación que por la que atraviesa Europa, hace inevitable que acuda a nuestra mente aquel lejano drama y la famosa frase de Churchill, que hoy vuelve a estar de actualidad, aunque en un escenario diferente: "Desde Sttetin, en el Báltico, a Trieste, en el Adriático, ha caído sobre el continente un telón de acero". Ahora 76 años después, cuando en la ciudad de Wuhan -China-, apunta una tímida luz de esperanza, sobre Europa ha caído un pesado velo negro que llena de angustia los corazones, las almas, marchitando y apagando la vida.
Superado el ecuador del año 2019, la Organización Mundial del Turismo daba a conocer las cifras de su barómetro turístico, el ranking del 2018, con algún cambio en la clasificación de los países, México uno de ellos, que pasaba del 6º al 7º lugar, sujeto con "pincitas".
De esta guisa y con esos "zorros", se iba vistiendo la cuestión turística, ora agitada por incertidumbres económicas y desajustes presupuestarios, ora por la inseguridad y el sargazo, una vez que se habían cerrado y con tres candados, la puerta de los CPTM, ahora reemplazados por un honorable Consejo de Diplomacia Turística, "CHÉ, campanudo nombre", diría un argentino.
Estando en ese proceso para que Richelieu, Maquiavelo y Talleyrand -padres de la diplomacia-, asumieran la gestión exterior del turismo, súbitamente "cayó la gota fría", a modo de antesala, anticipo inesperado de la que se avecinaba.
Salvo alguna voz del sector privado y bajando el tono, no hubo "augur" alguno que atándose los cordones saltara a la palestra haciendo ver que el "Veinte, veinte", posiblemente fuera menos favorable como se voceaba.
Y aun dando por bueno, que tal vez las cosas podrían pintar bien, los grises sobresalían adueñándose del paisaje turístico.
La IATA, como siempre "subida en el machito", obstinada en fortalecer el monopolio y la posición dominante, entre el cautiverio de las comisiones y alguna zancadilla extra. Por supuesto con el beneplácito de sus agremiadas, que tienen los "slots" bien puestos. Aunque siendo justos, al menos una línea aérea parecía salvarse de la quema, a la que habrá que otorgar mención de honor y público reconocimiento, cuando la plaga amaine. (1).
Pero la autosuficiencia y egolatría, no es exclusiva de IATA y las consocias del negocio aéreo, que cobija bajo sus largas alas. Con frecuencia, otras modalidades del transporte de viajeros, también tienen propensión a comportamientos y actitudes monopólicas.
Es evidente que los actores y operadores turísticos, no son meros convidados de piedra en la mesa de los medios de transporte -ni en la de otros-, aunque se revistan como un servicio público, en régimen de prestación privada, mediante el pertinente título de concesión o concierto, legalmente otorgado, sometido y subordinado a la satisfacción del interés general y las necesidades sociales.
Con mimbres ajenos trenzan y rematan sus cestos a medida, variando la operativa de horarios, intervalos de paso, servicio y oferta, gestión de viajeros, inicio y final de trayecto. Decisiones y cambios que si de por sí no deja inmune a agentes y prestadores, más se acrecienta al no mediar el necesario y conveniente lapso de tiempo, desde la aprobación de las nuevas condiciones del servicio y su efectiva aplicación o entrada en vigor.
Que los operadores turísticos no son inmunes a ciertas decisiones y cambios es evidente y diáfano, sin que requiera de más aclaratoria. Es evidente que el turismo siendo actividad humana, no es una ciencia exacta, estable o inmutable, en consecuencia impredecible y frágil, sometido a tendencias y tensiones, siempre condicionado por variables independientes e imprevisibles.
Actores y agentes son elementos activos y primordiales en un sector de imperfecto equilibrio, dependiente, interconectado y siempre supeditado a factores, influencias y constantes cambios.
"El batir de las alas de una mariposa puede provocar un huracán en otra parte del mundo"
Ciertas decisiones, se adoptan sin tomar en consideración al colectivo que asesora y promueve, exhibe y vende destinos y eso es síntoma de que algo no anda bien. No es casualidad, que desde tiempo atrás, las universidades de prestigio, incluyen en su oferta académica estudios de marketing, relaciones públicas y sicología de ventas, entre otros. Llegados a este punto hay que citar el marketing de relación, el marketing responsable proactivo y el marketing de sociedad, en el que "la empresa trabaja continuamente con los clientes para descubrir formas de mejorar el desempeño", citando a Philip Kloter. (2)
Pero aquí no acaba todo, estas tendencias y actitudes no son exclusiva de la actividad privada. Las administraciones públicas -salvo contadas excepciones-, no son un referente válido de la libre competencia e igualdad de oportunidades. donde mirarse. No son el fúlgido espejo del "principio de igualdad de acceso" en el que mirarse, ni un referente en lo que respecta al desarrollo, participación y promoción de proyectos turísticos. Por supuesto, menos sirven como avanzadilla o "Way Maker" para ese primer escalón que está conformado por los "verdaderos protagonistas de la difusión y comercialización del turismo".
"Toda organización que persiste a lo largo del tiempo, realiza las funciones del marketing para su desempeño.Manuel Rivera. Año 2016 -El blog de Estudia XXI-.
Las Agencias de viajes entre otras actividades, fomentan, intermedian y distribuyen, imbricadas en un sector de relaciones y prestaciones multirecíprocas. Son pieza importante en el mundo de los viajes, del turismo, la promoción, dinamización y venta de destinos, productos turísticos y medios de transporte.
La dinámica del turismo, gestión, operatividad y atención así lo precisa, por cuanto el turismo opera con personas, de manera individual o en colectivo. Estos "protagonistas" del turismo tienen como sana costumbre planificar -no muy habitual en algunas latitudes- con antelación sus periodos de ocio, tiempos de viaje y disfrute. Con esta misma actitud y aptitud, seleccionan y estudian los destinos, rutas, transportes y alojamientos, por supuesto sin faltar la gastronomía, atractivos naturales, entretenimiento y aventura.
Las Agencias de Viajes, no son simples despachadoras de boletos, meros trajinantes o marchantes de estereotipados viajes al por mayor. Las Agencias de Viaje, las auténticas y genuinas, se especializan en generar, mostrar y promover, en asesorar y sugerir. No regatean esfuerzos, regalando consejos y tips, sin faltar su oportuno auxilio, cuando se precisa. Escuchan y absorben ideas, deseos, peticiones y antojos de los clientes, puliendo y ajustando, hasta que el puzle encaja a la perfección, al gusto del cliente, tarea nada fácil en ocasiones.
A menudo surgen imprevistos, ocurrencias, que provocan cambios de fechas, duración del viaje, estancia, rutas y hasta ajustes de bolsillo. Ahí precisamente es cuando el Agente debe comenzar de nuevo, dedicando un esfuerzo y tiempo añadido. Sumen una incidencia de avión, tren, hotel, imprevistos de seguridad, sargazo, factores climáticos o alguna sacudida de una tierra que a veces se agita, un 7 o un 19 de septiembre(3). NO descarten un cliente "tiquismiquis", ese del que la comadrona con su primera mirada sentenció: "Lo siento han tenido un insatisfecho". Algunos hay, de esas y esos, que cada 3 horas exigen una atención casi en exclusividad, pegada o pegado al auricular:
"Mira, este boleto me lo tramitas tú, con una noche de hotel en santo lugar y las otras 2 noches en "pagano" hotel ya las reservo yo, porque me estás diciendo que el hotel no tiene "cuartos libres" y en "Rebusking. com" o "agarrahotel.com", aparecen disponibles.
Aunque con frecuencia, sucede que una vez en el "pagano" hotel, la señora siente la "dureza" del "overbooking" y se comunica con la agencia, muy digna ella o indignada, porque no hay "cuartos", sin entonar su particular "mea culpa".
¿En qué la puedo ayudar, señora?Búsqueme otro hotel "s'il vous plait. Por supuesto, a sus órdenes, como siempre.
En el antiguo régimen -nadie se emocione, es simple referencia a un periodo así denominado por los revolucionarios franceses- cualquier prestación de servicios o de actividades dependía del oportuno "privilegio real", no había de otra. El tercer milenio requiere y precisa de un nuevo estilo y relaciones, en un sector pleno de interacciones y recíprocos intereses, sin más privilegios o regalías.
En el entretanto, las asociaciones profesionales, como si la cosa no fuera con ellas, mirando a Pernambuco o buscando el Norte. Actitud e inercia que con mínimas novedades se mantuvo a lo largo de todo el año 2.019.
Lunes 23 de Septiembre, el mundo de los viajes despertaba con una noticia impactante, un histórico "padre del turismo" se declaraba en quiebra. Thomas Cook, después de 178 años de existencia bajaba la persiana y echaba el cierre, dejando a miles de viajeros varados, al pie de la escalerilla, sin vuelos ni hospedaje, en total incertidumbre, dando lugar a la mayor operación de retorno o repatriación de nacionales, nunca vista en tiempos de paz.
Un cierre que desde luego también afectaba a México, sobre todo a la zona de Cancún, donde las noticias sobre inseguridad y sargazo, ya habían hecho mella, generando vacilaciones y disminución del turismo.
"Grano a grano se levanta una montaña"