TURISMO Y EL DÍA "D" (4).

13.05.2020

   

   De acuerdo con el refranero Marzo es ventoso, pero también es el mes de los "Idus Martiae", esos famosos Idus de Marzo que los romanos tenían por favorables y de buenos augurios, aunque no parece que lo fueran tanto, ni entonces ni ahora, máxime si se atiende a los penosos sucesos de este 2.020.

    Y es que fue todo uno, llegar Marzo con los Idus y desatarse un vendaval de una virulencia tal que ni Plutarco o el mismo vidente, habrían podido predecir y aún menos los sucesos posteriores. 

   Julio César encontró al vidente y riendo, complacido, le dijo: "Los Idus de Marzo ya han llegado". El vidente contestó: Sí, pero aún no han acabado"

    Se liberó un pandemónium, que extendió sus agravios más allá de lo pensado, y lo peor del caso, es que quizás vino para quedarse (Dios guarde), o al menos, es lo que apuntan ciertos personajes, epidemiólogos, científicos y aficionados a la materia, sin faltar los clásicos -y atarantados- con "mando en plaza", que repiten el estribillo. 

Está de moda en boca de ciertos "sesudos", como dijo el filoso "castizo".

   Así es como en Marzo, ocurrió la catástrofe, advertida tiempo atrás por los escasos juiciosos, las "raras avis" que forman minoría. En ese momento saltaron las alarmas, prendieron en rojo los focos, mientras los pasos, murmullos y llamadas se apagaban, ahogados por un silencio que se volvía más denso, conforme se cancelaban más y más vuelos. Algo grande estaba sucediendo, pero aun así, la fiesta continuaba. 

    Llega el momento crítico en el que se activa el efecto dominó, cae la primera ficha y prosigue, lento pero sin pausa, con un tableteo, que en un principio no es más que un tintineo prácticamente imperceptible, hasta que se produce la reacción en cadena, cuando todas las fichas se desploman entre un martilleo insistente y frenético. 

    Extrañamente, estos hechos "tienen ocurrencia en el año de Dios de 2020", que según los pregoneros iba a ser el sumun, la  guinda del turismo, el engarce perfecto.
Era este, un año que pintaba verdes laureles, con una euforia como el 2012, año récord a nivel mundial, que alcanzó 1.035 millones de llegadas de turistas internacionales y en México 23,4 millones de llegadas. Un incremento del 12% .
   Un año "lleno de luces", listo para superar el 2017, cuando México mostró sus "poderosas credenciales" rebasando a Turquía y Alemania, plantando sus reales en el sexto lugar del ranking de la OMT.

    Año en el que México partía con ventaja, desde una favorable y consolidada situación turística, mostrando un crecimiento estable, continuado, sin los sobresaltos de anteriores épocas, resultado de un proceso serio, preciso, con conocimiento de causa. El fruto del trabajo y de la colaboración entre las distintas instancias y organizaciones del mundo turístico, acorde a la realidad y posibilidades del país.

   Y repentinamente, llegó la "anormalidad", dejando a todos pasmados, inanes ante un "lienzo" fondeado en gris oscuro, con escasas pinceladas cortas y algún que otro brochazo de rudo trazo, un cuadro inacabado, que impide adivinar cuál será el paisaje turístico resultante. 

   Situación que inevitablemente nos lleva hasta la retrospectiva siguiente:

     En el año 2010, los efectos de la crisis económica comienzan a suavizarse, la recuperación se hace notar y el turismo siempre tan sensible repunta. El número de viajeros internacionales alcanza los 940 millones a nivel mundial. México recibe 22.6 millones de turistas extranjeros, ocupando el 10º puesto del ranking mundial.


   * En el año 2012, México recibe 23.4 millones de llegadas internacionales. 

   * El año 2013, México se sitúa en el puesto número 10 del ranking. 

   * El año 2016, son 35.1 millones de turistas internacionales. México asciende al puesto 8º del ranking.


   * El año 2017, México recibe 39.3 millones de turistas internacionales, las cifras superan un 12% las del año anterior. 

   * En consecuencia, México asciende dos puestos en el ranking, pasando a un 7º lugar en el 2017.

 Año 2017. Número de cuartos: 794,581. 



  * El 2018, en el mundo entero, se registran 1.400 millones de llegadas, de turistas internacionales, un 6% más que el año anterior. La cifra de crecimiento del turismo supera al de la economía mundial que fue del 3,7%. 

    México recibe 41,4 millones de turistas internacionales, dos millones 567 mil viajeros menos que en el 2017, una reducción del -2.6%, quizás porque Turquía comienza a recobrar su potencial turístico, quizás porque factores de incertidumbre e inseguridad afectan a México. Como consecuencia, desciende un puesto en el ranking, pasando al 7º lugar. 

Año 2018. Número de cuartos 808,139. 


   * "El 2019, fue un año que registró 1.500 millones de llegadas de turistas internacionales en el mundo, confiando que este incremento del 4% con respecto al año anterior, se repita en el 2020, confirmando la posición del turismo como un sector económico pujante y resistente, muy especialmente teniendo en cuenta las actuales incertidumbres. Precisamente por eso, es necesario gestionar el crecimiento con responsabilidad y aprovechar de la mejor manera posible las oportunidades que el turismo puede ofrecer a las comunidades de todo el mundo. Precisamente por eso, es necesario gestionar el crecimiento con responsabilidad y aprovechar de la mejor manera posible las oportunidades que el turismo puede ofrecer a las comunidades de todo el mundo".  (Fuente OMT).

    México recibe 44.7 millones de turistas internacionales, un incremento del 8%, con respecto a 2018, captándose 24,562.6 millones de dólares. La actividad turística de México aportó el 8.7% al Producto Interno Bruto (PIB) del país y generó 2.3 millones de puestos de trabajo, que representan 6.0% del total nacional. México se mantiene en el 7º lugar del Ranking.



   La Secretaría de Turismo, en un comunicado de octubre de 2019, informaba que:

  •     En 2019, el total de la inversión extranjera directa, en el sector turístico sería de 507 millones 700 mil dólares. De esta cifra un 24.7 % correspondió al sector hotelero. 

  •     Se construyen 22.000 nuevos cuartos de hotel, terminando el año con un 2,7% más que en el 2018

  •     El Turismo aporta sobre un 8.7% del P.I.B. Con 4,5 millones de puestos de trabajo en el sector turismo. 

  •    Para 2020 se estimaba que el número de visitantes internacionales estaría en torno a los 47 millones.

2019 finaliza con 830,000 cuartos de hotel


    * El turismo es fuente de inversión directa, nacional o extranjera, para el desarrollo de actividades turísticas.

    * El turismo genera miles de empleos directos e indirectos.

    * El turismo no se limita a la construcción de hoteles, restaurantes, infraestructura deportiva, de aventura, entretenimiento, balnearios o análogos.

    * El turismo contribuye con el gasto que realizan los turistas en concepto de hospedaje, alimentación, bebidas, circuitos, visitas culturales.

  "Y por cierto, desde hace años también contribuye comprando artesanía local".   

    * Sin olvidar que su aportación, al tan traído, y llevado P.I.B. es bastante elevada. Antes de la "anormalidad" contribuía con un nada desdeñable 8,7%. 

      * Destacar que el turismo es fuente de divisas para el país. Millonaria entrada, que en 2019 fue de 25,562 millones de dólares.

  ¿Puede omitirse el semillero de empleos directos o indirectos a que da lugar?  

      * Otros aspectos no pueden quedar en el tintero, como que el turismo, hoy en día, es un factor importante de progreso, desarrollo socio-económico y reducción de la desigualdad, en sus zonas de influencia. 

"El turismo como elemento para la redistribución de la riqueza"

     * El turismo es protagonista activo en la conservación del entorno y el medio ambiente, un factor motivador para la mejora y puesta en valor de lugares, pueblos, monumentos, gastronomía, tradiciones.

   * Merece atención el aspecto fiscal, la vertiente impositiva del turismo, que últimamente se ve más como un "venero propiciatorio", del que poder extraer vitales recursos, sin un previo estudio de aforo y demanda del sector.

    * La fiscalidad que grava la industria del turismo, es maná para las arcas públicas no se circunscribe únicamente a los impuestos que podríamos calificar de "típicos", como el ISH, o de "hospedaje", el IVA, impuesto de vasto alcance siempre presente en la actividad. Y cómo desdeñar las múltiples tasas, sean aéreas, portuarias, de servicio, locales o la DNR, que el viajero internacional abona al entrar al país.

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