Mª LORENA RAMÍREZ. LA FUERZA DE LA MONTAÑA

   María Lorena Ramirez Hernández, Rarámuri por partida doble, por nacimiento y de espíritu. Desde que viene al mundo, recibe un legado exclusivo, la sangre que corre por sus venas, la misma sangre que desde antaño, se transmite de generación en generación. Es evidente que de ese legado proviene la energía y deriva la determinación que muestra. Quizás de tan singular patrimonio, obtiene la extraordinaria y admirable capacidad física de la que hace gala y con la que encara cada dificultad que encuentra, cada obstáculo que el terreno y la climatología le oponen, sin que su indomable voluntad ni ánimo sufran mella ni mengua.

   Lorena, por su ascendencia, desde que vino al mundo, estaba predestinada para correr y para la libertad. Y es que en la Tarahumara, libertad y correr van unidas, ligadas, se convierten en sinónimas, una de la otra, ambas dos son esencia y enjundia de la Comunidad, Cultura y Vida Rarámuri. Ser "pie ligero" la dirige, la empuja a correr y correr será una parte principal e inseparable de ella, por eso correrá en los momentos importantes de su vida y de la Comunidad, en los ordinarios, igual que en la rutina del día a día, el pastoreo y  la recolección.

   Del mismo modo a como lo hace su gente, correrá en la fiesta, por deporte, apostando o en ese juego atávico, que es la tradicional carrera de bola, la "rarakipuami" de los hombres y la "Ariweta" de las mujeres. Ella mejor que nadie sabe, que cuando un Rarámuri comienza a correr ya no se detiene, porque así lo demanda la tradición, el cuerpo y el espíritu de las montañas. Ese espíritu de la naturaleza que la acompaña y vivifica, que nunca la abandona, mientras ella se mantiene inasequible al desaliento.

   Ataviada con la típica falda o el tradicional vestido floreado, multicolor, tan pronto se le ve por el sendero, con sus zancadas cortas y rápidas, como se pierde entre las rocas y desniveles, reapareciendo impulsada en la bajada, donde más que correr parece volar. Y ahí va, con el gesto sereno, tranquila, mientras sus ojos profundos y luminosos otean el terreno, siempre precaviendo, en clara anticipación, la vista en  lontananza.    

   Y la misma brisa que acaricia su rostro, pareciera mandarle un mensaje, que viene desde su querida montaña, desde la siempre incomparable Sierra Tarahumara y que en su oído susurra: corre...corre....., mientras ella sigue adelante, corriendo incansable, en una costumbre repetida, un rito antiquísimo que se renueva a cada zancada, una encomienda cuyo origen se pierde en la oscuridad de los tiempos. Así es, así fue y así será mientras exista un Rarámuri caminando como ella sobre la tierra, por muy lejos que esté de las Barrancas del Cobre, ya corra en Francia, España o cualquier otra parte del mundo. Porque donde quiera que esté la fuerza de la tierra, de la montaña, irá con ella, infundiéndole la fuerza y el ánimo para que siempre corra libre.

TENERIFE " BLUETRAIL 2018" 

Estas Fotografías son cortesía de Caja Mar TENERIFE. Blue Trail Tenerife 2018.